Los costes de la no calidad, son aquellos en los que incurre una entidad o institución para poder remediar errores derivados de las actividades que se realizaron de manera incorrecta desde el principio, o para verificar de manera posterior si la calidad de los productos y servicios es la apropiada o si por el contrario requiere ser reparada. Esto calza con los problemas denunciados por los artículos de la Nación: unas largas esperas para recibir una cita para solicitud de ayuda social y problemas para las asignaciones de estas, en el IMAS; la ineficiencia del MOPT para dar citas y stickers de revisión técnica y el pago de más del MEP a educadores, por errores de proyección. Estos son todos problemas que generan costos innecesarios, en los que se incurre solamente por no brindar un verdadero servicio de calidad y solucionarlos implican grandes costos.
Es necesario a nivel país tomar medidas, mejorar aspectos como la transparencia, la rendición de cuentas, la capacitación del personal, la evaluación de los desempeños y resultados, etc. En síntesis, enfocarse en mejorar la calidad con la que trabajan nuestras instituciones y así brindar buenos servicios, que nos eviten a todos costos de no calidad.