Tantos el Sistema Nacional de Calidad, como las medidas restrictivas, surgen como un mecanismo para lograr la satisfacción de los consumidores. El objetivo es mejorar la calidad de los bienes o servicios, esto va a generar que se fomente la competencia entre los negocios y a la larga se logra obtener la confianza del consumidor y su fidelidad al producto. Pero no hay que dejar de lado que ambas medidas pueden tener ciertos aspectos negativos como por ejemplo:
- Puede llegar a disminuir la competencia, ya que algunos pequeños productores pueden no tener la herramientas para cumplir con todos los requisitos y los productores más grandes y con más recursos se pueden ver favorecidos en cierta medida de este hecho.
- Puede producir al consumidor un aumentos de los costos del producto, ya que todos los gastos realizados en aranceles o mejoramiento de la calidad se le van a trasladar al producto final.
- Se puede limitar las variedad de productos en el mercado, pues si existen muchos obstáculos, las importaciones se verán afectadas y se contará con menor variedad de productos.