Las lecturas dejan entre ver que la mala calidad tiene un costo elevado, pérdidas a la empresa que se traducen en términos monetarios, tiempo y de fidelidad de los clientes. Se plantean diferentes escenarios donde se observa cómo la falta de planificación, de control y de acción para tomar decisiones sobre acciones correctivas o preventivas, conlleva a una ineficiencia de las instituciones.
Destaco por ejemplo el caso del MEP, donde se da una planificación del proceso pero no se da un seguimiento durante el proceso por lo que al final se presenta un error, y aunque se buscan acciones para corregirlo es demasiado tarde porque eso supondrá inconformidad e insatisfacción del usuario para con el sistema. En el caso del MOPT por el contrario, no existe una planificación preventiva de errores a pesar que están conocedores que los errores se van a presentar, aun así deciden que actuarán hasta que estos se presenten, lo que supondrá pérdidas económicas y de tiempo para todos los involucrados.
Por lo tanto, se puede evidenciar que basta la falta de uno de los elementos de planificación, control, prevención o evaluación, para presentarse fallos o errores en los procesos.