El hecho que solo el 10% de personas manifiesta que se puede confiar en los demás, y menos de una de cada tres personas confía en su gobierno, es multicausal, sobretodo que una vez rota la confianza es dificil que se recupere. Entre los mutliples motivos se puede destacar
Confianza entre las personas
Las malas experiencias pasadas, como haber sido traicionados o engañados, dejan cicatrices que dificultan la confianza en el futuro; la falta de conocimiento o familiaridad con alguien nuevo puede hacer que las personas sean cautelosas y menos dispuestas a confiar; el entorno social y cultural también juega un papel importante; en lugares donde la corrupción y el crimen son comunes, la desconfianza se convierte en una actitud defensiva.
Los prejuicios y estereotipos sobre raza, religión, género o clase social también contribuyen a la desconfianza. La baja autoestima, puede llevar a proyectar miedos en los demás, dificultando la confianza. En ambientes altamente competitivos, la rivalidad puede generar desconfianza entre compañeros. La falta de comunicación clara y abierta puede llevar a malentendidos y sospechas, erosionando la confianza.
Desconfianza del gobierno
El crimen y la violencia son serios en muchos países, y la gente no siente que el gobierno los proteja adecuadamente. La corrupción también es un problema significativo, muchos ciudadanos ven a políticos y funcionarios utilizando sus posiciones para su propio beneficio, lo que hace que la gente desconfíe del gobierno. La desigualdad y la pobreza son muy altas en la región, y muchas personas sienten que el gobierno no está haciendo lo suficiente para mejorar sus vidas, lo que aumenta la desconfianza.
Además, la historia de inestabilidad política influye en la percepción actual. Muchas naciones han pasado por periodos de dictaduras o golpes de estado, lo que deja una huella de desconfianza en las instituciones actuales. Muchas personas también sienten que no tienen una verdadera participación en las decisiones del gobierno. Cuando la gente no siente que su voz es escuchada, es difícil que confíen en sus líderes e instituciones. La burocracia y la falta de transparencia en el gobierno también juegan un papel importante. Los procesos lentos y complicados frustran a las personas y les hacen pensar que el gobierno no es eficiente ni honesto.