Los casos presentados en las lecturas tienen en común un problema de falta de un eficiente sistema de control interno, sistema de control presupuestario o incluso de auditorías internas, y por el lento e ineficiente sistema burocrático que no detectó las irregularidades y su magnitud a tiempo.
Un ejemplo de ello lo observamos en el caso de la vía a San Carlos donde desde el 2019 el informe preparado por el Conavi indicaba la malversación de fondos. Y hasta que una diputada hizo público el informe en la Asamblea Legislativa fue que el Conavi y la contraloría General de la República tomó cartas en el asunto. Pero aún así entre investigación preliminar, procedimientos administrativos, la situación no se resuelve y aún en el 2024 se sigue esclareciendo el tema. Más que buscar responsables ( los cuales sí deberían ser amonestados, despedidos y enjuiciados ya que cometieron malversación de fondos), el sistema burocrático costarricense entre tantos procedimientos con fechas de caducidad provoca que estos casos salgan a la luz pública y aún así sigan sucediendo.
Si observamos el caso del IMAS, MOPT, CONAVI, MEP no poseen un sistema de gestión de calidad, y su control de gastos es regulado ineficiente mente. La escasa eficiencia en la gestión estatal ha hecho que los gastos de las entidades públicas sean dos veces sus ingresos. La situación del MEP por ejemplo sigue sucediendo todavía en el 2024, y que la excusa es esperar que finalice la matricula formal ( indican mayo) hace que sea imposible recuperar el dinero perdido.
Considero que existe una necesidad de actualizar el manejo de la administración pública, somos un país en crecimiento demográfico nacional, y eso conlleva que exista una mayor cantidad de personas que ocupen utilizar los servicios del estado, y usar métodos administrativos, de gestión y control de hace 20 años es peligroso, porque la demanda crece y las necesidades también. Actualmente muchas entidades estatales no tienen un sistema de gestión de la calidad y el no tenerlo está dejando graves daños económicos; como vimos en clase, el comenzar a gestionar la calidad en estas instituciones puede que lleve a largo plazo a disminuir gastos empleados para resarcir errores.